“Algunos pensaban que nuestras diferencias ideológicas habrían de llevarnos de manera inevitable al enfrentamiento”, dice AMLO a Trump
Valentín Alemán Santillán
“De modo que, guardadas todas las proporciones y en circunstancias sin duda distintas, la historia nos enseña que es posible entendernos sin prepotencias o extremismos”, afirma el presidente López Obrador
Entre mariachis, cantos y carteles de bienvenida de mexicanos en Estados Unidos, el presidente Andrés Manuel López Obrador inició este miércoles sus actividades en la capital estadounidense de Washington.
Acompañado del canciller Marcelo Ebrard Casaubón; de la secretaría de Economía, Graciela Márquez Colín; así como del jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo Garza, de la embajadora de México en Estados Unidos, Martha Bárcena; y de Christopher Landau, embajador de de la Unión Americana en México, López Obrador colocó ofrendas florales en los monumentos a Abraham Lincoln y Benito Juárez García.
En el homenaje al Benemérito de las Américas, Andrés Manuel saludó a la Bandera y entonó el Himno Nacional Mexicano en el Círculo de Juárez en Washington, DC.
La estatua en la que hoy rindió homenaje el jefe del Ejecutivo al presidente zapoteco, fue un regalo de México a Estados Unidos en reciprocidad con la estatua del mandatario Abraham Lincoln ubicada en el Parque Lincoln en la Ciudad de México.
La figura de Benito Juárez forma parte de la colección de la ciudad Estatuas de los Libertadores de los países del Hemisferio Occidental del dominio colonial. Su posición apunta en dirección al Memorial de Abraham Lincoln y hacia el busto del presidente George Washington.
Por la tarde, durante la firma de una declaración conjunta y celebrar la entrada en vigor del T-MEC, el presidente López Obrador destacó la importancia que tiene, sobre todo, en estos tiempos de crisis económica mundial, la entrada en vigor del Tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, lo que representa, dijo, un gran logro en beneficio de las tres naciones y de nuestros pueblos.
Puntualizó que el nuevo Tratado busca revertir ese desequilibrio de desarrollo mediante una mayor integración de nuestras economías y mejoras en el funcionamiento de las cadenas productivas para recuperar la presencia económica que ha perdido América del Norte en las últimas cinco décadas.
Recordó que en 1970, la región representó el 40.4 por ciento del producto mundial y, ahora, esta participación en la economía global ha bajado a 27.8 por ciento.
Por ello, el Tratado es una gran opción para producir, crear empleos y fomentar el comercio sin necesidad de ir tan lejos de nuestros hogares, ciudades, estados y naciones. En otras palabras, los volúmenes de importaciones que realizan nuestros países del resto del mundo, pueden producirse en América del Norte, con menores costos de transporte, con proveedores confiables para las empresas y con la utilización de fuerza de trabajo de la región.
De frente al presidente Trump, el mandatario mexicano sostuvo que algunos pensaban que nuestras diferencias ideológicas habrían de llevarnos de manera inevitable al enfrentamiento. Afortunadamente, ese mal augurio no se cumplió y considero que hacia el futuro no habrá motivo ni necesidad de romper nuestras buenas relaciones políticas ni la amistad entre nuestros gobiernos.
De modo que, guardadas todas las proporciones y en circunstancias sin duda distintas, la historia nos enseña que es posible entendernos sin prepotencias o extremismos, agregó tras destacar el entendimiento que en su momento hubo entre Benito Juárez y el gran presidente republicano Abraham Lincoln. Recordemos que este gran líder histórico estadounidense, el impulsor de la abolición de la esclavitud, nunca reconoció al emperador Maximiliano, impuesto en México con la intervención del poderoso ejército francés.
Con acuerdos como este y con respeto a nuestras soberanías, en vez de distanciarnos estamos optando por marchar juntos hacia el porvenir. Es privilegiar el entendimiento, lo que nos une y hacer a un lado las diferencias o resolverlas con diálogo y respeto mutuo, aseveró el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Juntos contra la corrupción
Antes, al hacer uso de la palabra el mandatario estadounidense se congratuló porque el primer viaje de Andrés Manuel haya sido a la Casa Blanca, y destacó la estrecha amistad que guarda con su homólogo mexicano desde la apabullante victoria del político tabasqueño el 1 de julio de 2018.
La relación de México y Estados Unidos jamás ha sido tan estrecha. La gente le ha apostado en contra, pero nuestra relación no ha podido ser mejor, dijo Trump al destacar que ambos fueron electos para combatir la corrupción y devolverle el poder al pueblo.
Luego, el magnate neoyorquino se reconoció los aportes de los mexicanos en Estados Unidos al reconocerlos como buenos negociadores.
Comentó que durante la reunión se trataron apremiantes como la migración y agradeció a López Obrador los resultados significativos en la frontera entre México y Estados Unidos.
(Foto Twitter)