Ataques de Israel en Gaza, “pueden constituir crímenes de guerra”: Bachelet

Mientras los israelís “disponen de la Cúpula de Hierro y fuerzas militares profesionales para defenderlos, los palestinos no tienen protección alguna ante ataques aéreos contra una de las zonas más densamente pobladas del mundo. No tienen lugar al que escapar, debido al bloqueo por tierra, mar y aire implementado en los últimos 14 años”, destaca la Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó este jueves una resolución cuyo objetivo es intensificar el escrutinio a la forma como Israel trata a los palestinos, luego de que la Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, dijera que las fuerzas israelís pudieron haber cometido crímenes de guerra y que el grupo islamista Hamas infringió las leyes internacionales durante su reciente enfrentamiento armado de 11 días.

Dichos ataques pueden constituir crímenes de guerra si se determina que son indiscriminados y desproporcionados en su impacto sobre civiles y bienes de carácter civil, afirmó Michelle Bachelet.

La Alta Comisionada dijo que ambas partes tienen derecho a defender a sus ciudadanos y que los palestinos tienen derecho a vivir de manera segura y libre en sus hogares, algo que no han podido experimentar debido al bloqueo israelí.

Respecto a las condiciones de seguridad, la ex presidenta de Chile subrayó que mientras los israelís disponen de la Cúpula de Hierro y fuerzas militares profesionales para defenderlos, los palestinos no tienen protección alguna ante ataques aéreos contra una de las zonas más densamente pobladas del mundo. No tienen lugar al que escapar, debido al bloqueo por tierra, mar y aire implementado en los últimos 14 años, precisó la responsable de derechos humanos de Naciones Unidas.

La resolución adoptada este jueves por el Consejo de Derechos Humanos, establece con carácter de urgencia una comisión internacional independiente para que investigue las presuntas violaciones y abusos de las garantías fundamentales en el territorio ocupado palestino, incluida Jerusalén Oriental, y en Israel, cometidas antes y después del 13 de abril de 2021.

El presidente del máximo órgano de derechos humanos nombrará próximamente a los integrantes de la comisión, que deberá reportar sus hallazgos y actividades en la 50ª sesión el Consejo y en la 77ª sesión de la Asamblea General de la ONU.

El documento se aprobó con 24 votos a favor, 9 en contra y 14 abstenciones en la sesión especial sobre el último episodio del conflicto de larga data entre israelíes y palestinos, celebrada a petición de Pakistán en nombre de la Organización para la Cooperación Islámica.

El texto dispone, entre otras cosas, que la comisión también indague todas las causas subyacentes de las tensiones recurrentes, la inestabilidad y la prolongación del conflicto, incluida la discriminación y la represión sistemáticas basadas en la identidad nacional, étnica, racial o religiosa.

Del mismo modo, el grupo investigador deberá identificar, cuando sea posible, a los responsables, con miras a asegurar que los perpetradores de violaciones rindan cuentas.

En la resolución, el Consejo de Derechos Humanos llama a todos los Estados, organismos internacionales y otros donantes a que movilicen urgentemente el apoyo humanitario para la población civil palestina en el territorio ocupado palestino, incluida Jerusalén Oriental, y a que atiendan sus necesidades imperantes, y exhorta a Israel, la potencia ocupante, a que garantice la ausencia de obstáculos entrega de esa asistencia humanitaria.

La prisión más grande del mundo

El relator especial sobre la situación de los derechos humanos en el territorio palestino ocupado desde 1967, presente en la sesión especial del Consejo, instó una vez más a que la última escalada, la más grave desde 2014, sea investigada por la Corte Penal Internacional.

En ese foro, Michael Lynk describió a Gaza como la prisión más grande del mundo y afirmó que ese enclave no es más que una pequeña franja de tierra, que alberga a más de dos millones de personas bajo ocupación, aislada del mundo exterior por un bloqueo ilegal aéreo, marítimo y terrestre.

Al respecto, el experto hizo hincapié en que sólo Israel tiene autoridad para determinar quién y qué entra y sale de la Franja de Gaza.

Cuando la violencia intensa regresa a Gaza, como ocurre habitualmente, no hay escapatoria. La prolongación de esta restricción medieval de las libertades básicas durante 14 años es una mancha desgarradora en nuestra humanidad, acotó.

Repetición del pasado

Lynk aseveró que los hechos de este mes en el territorio ocupado palestino, no son más que una calamitosa repetición de los ocurridos en 2018, 2014, 2012, 2008-09, 2000, 1987 y más y más en la trágica historia de los palestinos, y advirtió que Israel no pondrá fin a su ocupación si no hay una acción internacional decisiva que se base en el marco del derecho internacional.

El relator insistió en que la ocupación de Israel es arraigada y sostenible porque la comunidad internacional nunca ha impuesto un costo significativo a Israel por actuar como una potencia ocupante adquisitiva y desafiante.

Los asentamientos devoran el futuro palestino colectivo

Al hablar de los 2.7 millones de palestinos en Cisjordania, Link recalcó que viven en 167 islas de tierra fragmentadas, separadas del mundo y entre sí por puestos de control, muros, asentamientos y carreteras israelíes exclusivas para los colonos. (…) Su futuro colectivo está siendo devorado ante sus ojos por los 240 asentamientos israelíes que se expanden en sus tierras.

Finalmente, enfatizó la exigencia repetida de las Naciones Unidas a lo largo de los años, de que Israel cumpla con sus obligaciones legales internacionales y retire sus asentamientos, detenga sus desalojos, ponga fin a la anexión ilegal y detenga las demoliciones y la expulsión forzosa de palestinos de sus hogares en Jerusalén Oriental.

En vista de que Israel ha ignorado este reclamo, respondiendo de manera desafiante, la comunidad internacional debe recurrir a un nuevo manual diplomático centrado en el derecho internacional que ponga fin a la ocupación israelí, argumentó Lynk.

Plan humanitario

En este contexto, Lynn Hastings, coordinadora humanitaria de la ONU en Gaza, presentó en conferencia virtual este jueves un plan de emergencia para asistir a los palestinos afectados por la última escalada de violencia, que empezó los primeros días de mayo y costó cerca de 250 vidas palestinas y diez israelíes, así como miles de heridos y gran destrucción material en la Franja de Gaza, donde las condiciones de vida de la población eran ya muy precarias a causa del bloqueo israelí.

Solicitó a la comunidad internacional de donantes que aporte 95 millones de dólares para implementar con celeridad el plan en Gaza y Cisjordania durante los próximos tres meses.

Hastings se refirió a su visita a Gaza inmediatamente después del alto el fuego, donde se reunió con familias que perdieron sus hogares y medios de vida como resultado de los bombardeos israelís y observó de primera mano los daños a la infraestructura civil que, entre otras cosas, dejaron a 800 mil personas sin acceso regular al agua.

Agregó que las averías provocaron la descarga de las aguas residuales sin tratar al mar, lo que supone riesgos para la salud, al margen de la contaminación que provoca.

Destacó que 54 instalaciones educativas, seis hospitales, once centros de atención primaria de la salud y la red eléctrica, resultaron dañadas y que las familias sólo tienen electricidad entre cuatro y seis horas al día. En resumen, los palestinos de Gaza cuentan ahora con menos acceso a los de por sí limitados servicios básicos que existen en ese territorio en un momento en el que los sistemas de salud se encuentran sobrecargados debido a la pandemia de Covid-19, acotó.

La ONU desembolsó a principios de esta semana 18 millones de dólares del Fondo Humanitario para el Territorio Palestino Ocupado y 4.5 millones del Fondo para Ayuda de Emergencia. Con esos recursos, el personal de la Organización y las ONG asociadas distribuyen alimentos y agua, y brindan atención médica y otros servicios a la población necesitada; sin embargo, urgen más recursos para satisfacer las grandes carencias humanitarias.

“No debemos fallarles”

En tanto, el Secretario General de las Naciones Unidas apeló a los donantes, dijo que en las últimas semanas, el mundo vio cómo los civiles soportaban otro ciclo de violencia y destrucción devastadoras.

Niños y adultos murieron, miles resultaron heridos. Las familias han visto sus vidas destrozadas. Es nuestro deber ahora ampliar el apoyo a quienes más lo necesitan. No debemos fallarles, subrayó António Guterres.

Explicó que la ONU está trabajando para garantizar que se mantenga el alto el fuego y que ninguna de las partes cometa acciones que pudieran escalar el conflicto de la forma en que lo hizo este mes.

Una vez más, Guterres abogó por la calma y estabilidad en Israel y el Estado de Palestina para resolver pacíficamente el conflicto y acabar con la ocupación israelí.

Precisamos un horizonte político prometedor destinado a poner fin a décadas de ocupación militar, estancamiento político, agravios y desesperanza, puntualizó el Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas.

(Fuente Agencias/Fotos Twitter)