Estados Unidos apela negativa británica de extraditar a Julian Assange

El fundador de WikiLeaks, podrá cumplir en su país de origen, Australia, cualquier sentencia que le dicten las autoridades estadounidenses, promete el gobierno de la Unión Americana al pedir al Alto Tribunal británico que revoque la decisión de una jueza de que Julian Assange no debe ser enviado a Estados Unidos para enfrentar 17 cargos de espionaje y uno de delito informático, que conllevan una pena máxima de 175 años de prisión

Redacción Círculo Rojo

Con la promesa de que el fundador de WikiLeaks, podrá cumplir en su país de origen, Australia, cualquier sentencia que le dicten las autoridades estadounidenses, el gobierno de la Unión Americana pidió este miércoles al Alto Tribunal británico que revoque la decisión de una jueza de que Julian Assange no debe ser enviado a Estados Unidos para enfrentar cargos de espionaje.

En enero pasado, la jueza de distrito, Vanessa Baraitser, rechazó la solicitud estadounidense de extradición de Assange por delitos de espionaje en torno a la publicación de documentos militares secretos hace una década por parte de WikiLeaks.

La jueza del tribunal inferior rechazó la extradición por motivos de salud y dijo que probablemente Assange intentaría suicidarse si era retenido en condiciones duras en una prisión estadounidense.

James Lewis, un abogado del gobierno estadounidense, argumentó este miércoles que la jueza erró cuando falló que Assange corría riesgo de suicidarse debido a las condiciones opresivas.

Las autoridades estadounidenses habían prometido que Assange no estaría detenido antes del juicio en una prisión de alta seguridad Supermax ni sería sujeto a condiciones de aislamiento estricto y, de ser condenado, podría cumplir su sentencia en Australia, agregó.

Las garantías son vinculantes en Estados Unidos, dijo Lewis al argumentar que Assange no llega al umbral de enfermedad para que no pueda evitar autolesionarse.

Assange ni siquiera está cerca de una enfermedad de este nivel, señaló Lewis

Puntualizó que una vez que haya una garantía de atención médica adecuada, una vez que esté claro que será repatriado a Australia para cumplir con cualquier sentencia, entonces podemos decir con seguridad que la jueza de distrito no habría decidido esa cuestión relevante en la forma en que lo hizo.

El abogado de Assange, Edward Fitzgerald, dijo en una petición escrita que, de ser condenado, Australia no había acordado recibir a Assange. Incluso si lo hiciera, Fitzgerald, el proceso legal estadounidense podría demorar décadas, durante las cuales el señor Assange permanecerá detenido en aislamiento extremo en una prisión de Estados Unidos.

Acusó a los abogados estadounidenses de intentar minimizar la severidad del desorden mental y riesgo de suicidio del señor Assange.

Varias decenas de partidarios de Assange, entre ellos su padre Richard Assange, protestaron ante la Corte Real de Justicia de Londres antes de la audiencia, programada para los días 27 y 28 de octubre.

Se esperaba que Julian Assange, recluido en la prisión Belmarsh de alta seguridad en Londres, asistiera por videoconferencia, pero Fitzgerald indicó que le habían administrado una alta dosis de medicamento y no se siente capaz de asistir al proceso.

En un video después se vio que aparentemente Assange escuchó la audiencia en todo momento. Sus abogados indicaron que ha experimentado una serie de problemas físicos y mentales a lo largo de los años. La pareja de Assange, Stella Moris, dijo afuera del Tribunal Superior que estaba muy preocupada por la salud de Julian. Lo vi el sábado, está muy delgado.

Los dos jueces que instruyen la apelación -incluido el juez de mayor rango de Inglaterra, Ian Burnett- darán su veredicto varias semanas más tarde.

Es probable que ese tampoco sea el final de la batalla legal, ya que el bando perdedor podría buscar una apelación ante la Corte Suprema británica.

La fiscalía estadounidense presentó 17 cargos de espionaje y uno de delito informático contra Assange por la publicación en WikiLeaks de miles de documentos militares y diplomáticos filtrados. Los cargos conllevan una pena máxima de 175 años de prisión, aunque Lewis dijo que la sentencia más larga jamás impuesta por este delito es de 63 meses.

Los fiscales estadounidenses acusan a Assange de ayudar de forma ilegal a la analista militar de inteligencia Chelsea Manning a robar despachos diplomáticos clasificados y archivos militares que WikiLeaks publicó más tarde.

Al respecto, los abogados de Assange afirmaron que actuaba como periodista y que tiene derecho a las protecciones de la libertad de expresión recogidas en la Primera Enmienda por publicar documentos que dejaron al descubierto malas prácticas del Ejército estadounidense en Irak y Afganistán.

En su fallo de enero, Baraitser ​​rechazó los argumentos de la defensa de que Assange es víctima de una persecución estadounidense con motivos políticos que afectaría a las protecciones de libertad de expresión, y determinó que el sistema judicial estadounidense le ofrecería un juicio justo.

Assange, de 50 años, lleva en prisión desde que fue detenido en abril de 2019 por saltarse los términos de su libertad bajo fianza en otra batalla legal. Antes de eso pasó siete años escondido en la embajada ecuatoriana en Londres, a la que huyó en 2012 para evitar su extradición a Suecia, donde estaba acusado de violación y agresión sexual.

Suecia archivó las investigaciones por delitos sexuales en noviembre de 2019 porque había pasado demasiado tiempo, pero Assange sigue en prisión. La juez que bloqueó su extradición en enero ordenó que siguiera retenido mientras se instruía cualquier apelación estadounidense, ya que el reo tiene un incentivo para fugarse si es liberado.

Los partidarios de WikiLeaks dicen que las declaraciones de los testigos durante la vista de extradición, que Assange fue espiado cuando estaba en la embajada por una firma española de seguridad a instancias de la CIA -e incluso de que se barajó secuestrarle o asesinarle-, socavan las afirmaciones estadounidenses de que recibirá un trato justo.

Moris, quien tiene dos hijos pequeños con Assange, dijo que es totalmente impensable que los tribunales del Reino Unido estén de acuerdo con la extradición.

Espero que los tribunales pongan fin a esta pesadilla, que Julian pueda regresar pronto a casa y que prevalezca la sensatez, agregó.

(Fuente Agencias/Fotos Twitter)