Aumentarán las víctimas civiles y los desplazamientos de población en Ucrania, advierte la ONU
Responsables de las agencias para los refugiados y migrantes advirtieron de que se está “desatando una pesadilla humanitaria” en el Centro y el Este del país, que provocará más víctimas civiles. Unos 13 millones de personas están en zonas afectadas por los combates a las que es difícil llevar ayuda de forma segura
Las agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para migrantes y refugiados, alertaron ante el Consejo de Seguridad de que el recrudecimiento de los ataques a ciudades ucranianas conllevará más víctimas civiles y más desplazamientos de población.
Seguimos profundamente preocupados por el continuo deterioro de la situación humanitaria en Ucrania: Al ser las ciudades cada vez más atacadas, hay más civiles atacados y afectados, lo que provocará más sufrimiento humano, más víctimas civiles y más desplazamientos, tanto internos como externos, dijo Antonio Vitorino, director de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
La situación es especialmente mala en el Centro y el Este del país donde se está desatando una brutal pesadilla humanitaria, dijo la alta comisionada adjunta de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Kelly Clemens.
Horas antes, el Secretario General de la ONU, António Guterres, hizo un llamamiento para una pausa humanitaria y advirtió que la violenta ofensiva y el terrible número de víctimas civiles que hemos visto hasta ahora, podrían palidecer en comparación con el horror que se avecina con la ofensiva en el Este del país.
Casi cinco millones de refugiados
Desde que comenzó la invasión rusa el 24 de febrero, casi cinco millones de personas se han visto obligados a abandonar Ucrania, además de los más de siete millones que siguen desplazados dentro del país.
La ONU también calcula que otros 13 millones se encuentran en las zonas más afectadas, muchos de ellos sin poder desplazarse y a los que es difícil llegar con ayuda de forma segura.
El responsable de la OIM, explicó que los desplazados internos tienden a trasladarse a las zonas urbanas en busca de oportunidades de trabajo y servicios sociales. Por lo tanto, podemos suponer movimientos adicionales de personas hacia estas zonas que se perciben como más seguras. Habrá una necesidad urgente de ampliar los servicios para satisfacer las necesidades de una mayor población en estas zonas, dijo.
Según Vitorino, la entrega de dinero en efectivo es una de las formas más factibles, eficientes y eficaces de llegar a las personas necesitadas tanto dentro de Ucrania como en los países vecinos, y su agencia, en coordinación con otros organismos de la ONU, pretende llegar a medio millón de personas en tres meses.
La OIM también seguirá proporcionando alimentos, artículos de refugio y kits de higiene en Ucrania, y trabajando con el gobierno y las autoridades locales de Ucrania para buscar soluciones de larga duración para los desplazados internos.
ACNUR está aumentando la asistencia en efectivo para llegar a 360 mil personas vulnerables dentro del país. Además, ha firmado ahora acuerdos con tres ministerios de Ucrania para llevar labores de reparación, en apoyo del gobierno.
Apoyo a los que regresan
Los responsables de las agencias insistieron en que es necesario comprender mejor las intenciones de los que huyen, de los que se ven obligados a abandonar sus hogares y de los que han sido separados de sus familias debido al conflicto.
Aunque muchos tendrán la intención de volver, otros no podrán hacerlo o decidirán no hacerlo, sostuvo Vitorino.
Los millones de personas que huyen de Ucrania no sólo requieren ayuda de emergencia en los primeros momentos, sino también invertir en políticas e intervenciones de integración temprana que faciliten su inclusión social.
Dado que es probable que haya más personas desplazadas, es crucial planificar con antelación y garantizar que todos los que huyen de la guerra tengan acceso a un apoyo y unos servicios adecuados, y facilitar su plena inclusión en los sistemas educativo y sanitario, así como en el mercado laboral, ofrecer oportunidades lingüísticas, viviendas sociales y otras ayudas necesarias, explicó.
Este enfoque inclusivo es, sin duda, la mejor manera de que los refugiados mantengan su vida en el exilio, y requiere más apoyo internacional, añadió Clemens.
Además, la gran mayoría de los desplazados siguen siendo mujeres y niños, por lo que los riesgos de violencia de género, tráfico de personas y explotación y abusos sexuales son elevados. Ya están llegando testimonios sobre personas que se acercan a los desplazados con promesas demasiado buenas para ser ciertas de trabajo, alojamiento y transporte. Los primeros casos identificados de tráfico de personas confirman que estos riesgos se están haciendo realidad, sostuvo Clemens.
Por eso, ACNUR y la OIM están reforzando programas de violencia de género, y han desplegado coordinadores expertos en la prevención de la explotación y el abuso sexual para apoyar la respuesta de los gobiernos.
Las ciudades sitiadas
Desde Ginebra, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) informó este martes de que unos seis millones de personas necesitarán comida y asistencia en efectivo. La agencia ha logrado trasladar ayuda a zonas previamente inaccesibles como Bucha, Irpin, Hostomel y Borodianka
El Programa ha movilizado 60 mil toneladas de alimentos para Ucrania, que proporcionarán asistencia a unos dos millones de personas durante dos meses, dijo Jacob Kern, coordinador del PMA en Ucrania.
La agencia ha llegado a 1.7 millones de personas en Ucrania a través de la asistencia alimentaria y 3.6 millones de dólares en transferencias en efectivo en las zonas donde los mercados funcionan.
La mayoría de las personas a las que asisten —1.4 millones del total— son familias atrapadas en las zonas cercadas. Pero muchos de los más vulnerables siguen fuera del alcance detrás de las líneas de conflicto.
A pesar de la inestabilidad de la situación de seguridad, el PMA ha entregado 113 toneladas métricas de alimentos a familias vulnerables en las ciudades sitiadas de Kharkiv, Sumy y Severodonetsk, a través de cuatro convoyes humanitarios de la ONU. Eso es suficiente para 20 mil personas durante diez días.
Sólo en la ciudad de Mariúpol, hay más de 100 mil personas que llevan semanas sin poder salir y que necesitan desesperadamente alimentos, agua y otros suministros esenciales. En estas circunstancias, cualquier enfermedad que normalmente puede tratarse con medicamentos se convierte en una situación de riesgo para la vida, advirtió Kern, insistiendo en que es necesario que se abran vías para llegar a la población. Mariúpol probablemente necesitaría entre dos y tres camiones al día, así que no es cuestión de ir con 10 camiones una vez al mes, eso no va a arreglarlo. Se necesita el acuerdo de todas las partes, y hasta ahora no lo hemos conseguido.
(Noticias ONU)