“Fueron acribillados sin más defensa que la fe en Dios”: obispo González Sandoval
Los sacerdotes jesuitas, Javier Campos Morales, de 79 años, conocido como ‘El Padre Gallo’, y Joaquín Mora Salazar, de 80, fueron asesinados ayer lunes al interior de la iglesia de la comunidad de Cerocahui, del municipio Urique, en Sierra Tarahumara de Chihuahua, por un pistolero que persiguió hasta dentro del templo y ejecutó a un guía de turistas. Los atacantes se llevaron los cuerpos de las tres victimas, a pesar de las suplicas de un sobreviviente que pedía que los dejaran
Redacción Círculo Rojo
Los sacerdotes, Javier Campos Morales, de 79 años, conocido como El Padre Gallo, y Joaquín Mora Salazar, de 80, fueron acribillados en el mismo templo sin más defensa que la fe en Dios al que sirvieron por cincuenta años, afirmó el obispo de la Diócesis de la Tarahumara, en Chihuahua, Juan Manuel González Sandoval al condenar el asesinato de los jesuitas ayer lunes al interior de la iglesia de la comunidad de Cerocahui, del municipio Urique, en ese estado fronterizo.
De acuerdo con el relato que ofreció un jesuita sobreviviente a los hechos registrados alrededor de las 18:00 horas del lunes, una persona entró corriendo al templo mientras era perseguida por otra. En ese momento Campos Morales y Mora Salazar le exigieron al presunto delincuente detener el ataque en la iglesia y minutos después, todos fueron ejecutados de varios disparos. Los atacantes se llevaron los cuerpos de las tres víctimas a pesar de las súplicas del sacerdote sobreviviente que pidió que los dejaran en el lugar, informó la oficina de prensa de la Compañía de Jesús en México.
Conmocionado por los hechos, el obispo González Sandoval manifestó que no conformes con matarlos, los asesinos se han llevado sus cuerpos, sufriendo la misma suerte de tantos desaparecidos dejando estela de dolor, tristeza e indignación en todos los que los queremos y quisiéramos rendirles homenaje.
La Compañía de Jesús demandó a las autoridades que de manera inmediata adopten medidas de protección para asegurar la vida de los religiosos de la comunidad de Cerocahui que, afirmaron, enfrenta condiciones de violencia y olvido de parte del Estado.
Los jesuitas de México no callaremos ante la realidad que lacera a toda la sociedad. Seguiremos presentes y trabajando por la misión de justicia, reconciliación y paz, a través de nuestras obras pastorales, educativas y sociales, expresó la congregación al exigir a las autoridades que sean recuperados los cuerpos y haya justicia.
A su vez, la Conferencia del Episcopado Mexicano también condenó los hechos y exigió en un comunicado una pronta investigación y seguridad para la comunidad y todos los sacerdotes del país.
Con profundo dolor e indignación, nos unimos en oración con la compañía de Jesús, por el lamentable asesinato de dos de sus sacerdotes jesuitas, manifestó.
Por la mañana, en su conferencia de prensa en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador precisó que las autoridades ya tienen información sobre los posibles responsables de los asesinatos y agregó que la zona donde ocurrieron los hechos tiene bastante presencia de la delincuencia organizada.
Luego, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) confirmó la tarde de este martes que ya está identificado el responsable de los crímenes y se continúa con la investigación para dar con su paradero y no permitir la impunidad.
(Fotos Twitter)