ONU teme una escalada bélica entre Israel y Hamás tras la muerte en bombardeo israelí del líder islámico, Ismail Haniyeh
El bombardeo israelí en un área densamente poblada de la capital libanesa el martes por la noche, causó la muerte de al menos tres personas, una mujer y dos niños, e hirió a decenas más, según informes de prensa. En Teherán, un ataque atribuido a Israel por las autoridades iraníes dejó muerto al líder de Hamás. El titular de la ONU subraya el riesgo enorme de una escalada regional en un momento en el que urge un alto el fuego en Gaza, y pide acción internacional para evitar una conflagración
Redacción Círculo Rojo
La muerte en Teherán del líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, durante el bombardeo de ayer martes de fuerzas israelíes en Irán, así como el ataque a suburbios densamente poblados del sur de Beirut, en Líbano, con saldo de una mujer y dos niños muerto y decenas de heridos, representan una peligrosa escalada en el conflicto armado entre Israel y la resistencia islámica, advirtió este miércoles el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres.
Estos ataques representan una peligrosa escalada en un momento en el que todos los esfuerzos deberían conducir a un alto el fuego en Gaza, la liberación de todos los rehenes israelíes y un aumento masivo de la ayuda humanitaria para los palestinos en Gaza y un retorno a la calma en el Líbano y al otro lado de la Línea Azul, afirmó Guterres.
En un comunicado leído por su portavoz, Stephan Dujarric, el jefe de la ONU lamentó que al contrario de lo que hace falta para lograr esos objetivos, lo que estamos viendo son esfuerzos por socavarlos; cada vez está más claro que la moderación por sí sola es insuficiente en este momento tan sensible.
Sin embargo, ante esta situación Guterres instó todos los actores internacionales a trabajar enérgicamente para lograr una reducción de las tensiones regionales en aras de la paz y la estabilidad a largo plazo para todos.
La comunidad internacional debe trabajar en conjunto para prevenir urgentemente cualquier acción que pueda llevar a todo el Medio Oriente al límite, con un impacto devastador para los civiles. La manera de hacerlo es impulsando una acción diplomática integral para reducir las tensiones en la región, concluyó el comunicado del titular de la ONU.
Evitar una mayor escalada
El martes por la noche, Stephan Dujarric indicó que mientras la ONU espera una mayor claridad sobre las circunstancias en que ocurrió el ataque en Beirut, Naciones Unidas llama nuevamente a las partes a ejercer la máxima moderación y llama a todos los interesados a evitar una mayor escalada.
En su comunicado de ayer, la ONU también pidió a todas las partes que cumplan con sus obligaciones en virtud del derecho internacional; que se comprometan urgentemente a la plena aplicación de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas, adoptada en respuesta a la guerra de 2006 entre Hezbolá e Israel, y que regresen de inmediato al cese de hostilidades.
No hay una solución militar
En estos términos, la coordinadora especial de la ONU para Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert, sumó su voz al reclamo de que prevalezca la calma en una declaración en la que manifestó profunda preocupación por los ataques en Beitur y destacó el poblado entorno en que tuvieron lugar.
Hennis-Plasschaert, afirmó que no existe una solución militar y pidió a Israel y a Líbano que se valgan de todas las vías diplomáticas para lograr la vuelta al cese de las hostilidades y renovar su compromiso con la aplicación de la resolución 1701.
Los ataques aéreos en la capital libanesa se produjeron tras la embestida con cohetes del sábado pasado contra un campo de futbol en los Altos del Golán, Siria, ocupados por Israel, que resultaron en la muerte de doce civiles, la mayoría de ellos menores de edad.
Consecuencias regionales de largo alcance
En el mismo tono, el coordinador especial de la ONU para el Proceso de Paz en Medio Oriente, Tor Wennesland, advirtió que el ataque en Beirut tendrá consecuencias de gran alcance en la región.
Urjo a la moderación y a evitar acciones que puedan desestabilizar aún más la región, apuntó el diplomático al señalar que se mantiene en contacto con todas las partes pertinentes para buscar la forma de reducir las tensiones.
El objetivo de estos esfuerzos es claro: reducir la escalada regional, incluido el logro de un alto el fuego y la liberación de todos los rehenes en Gaza, y trabajar en pos de una paz duradera, subrayó Wennesland.
(Fuente ONU)