A un voto del abismo

Por: Sebastián Godínez Rivera

La votación de la reforma electoral y algunas otras que buscan derrumbar la división de poderes, en aras de concentrar el poder en un solo partido. La votación en el Senado de la República ha obligado a que la sociedad civil presione a los legisladores del PRI, PAN y MC para votar de forma conjunta en contra. Si la oposición no actúa de forma conjunta, el país estará perdido.

Cada uno de las 43 senadurías opositoras, han respondido que no traicionará la confianza del electorado y fungirán como un contrapeso a la mayoría oficialista. Esto ha llevado a que los presidentes de los partidos y las coordinaciones parlamentarias se hayan visto forzadas a tomar medidas. Guadalupe Murguía coordinadora de los senadores panistas ha dicho que llamará a los 22 suplentes a la Ciudad de México para impedir que Morena pueda aprobar la reforma por la falta de algún legislador.

Por otro lado, el senador y presidente del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, ha dicho que toda la bancada tricolor votará en contra; a esto se suma que el exgobernador de Coahuila Miguel Riquelme está internado. Esto despertó suspicacias, Riquelme mandó un mensaje desde el hospital diciendo que estará presente y en caso de no poder asistir, se convocará a su suplente. El  PRI también está convencido que detendrá la deriva autocrática y frenará a la aplanadora oficialista.

Mientras tanto, Movimiento Ciudadano en voz de Clemente Castañeda ha declarado en diversos noticiarios que toda la bancada naranja irá en contra. Esta presión se desató debido a que uno de los senadores, no se había posicionado para votar en contra de la reforma. Esto generó que los internautas comenzaran a etiquetar y arrobar al legislador naranja para saber si votaría en favor o en contra. Finalmente, las dudas se disiparon cuando toda la bancada de MC no dará ni uno solo voto para el oficialismo.

Toda la oposición se ha conjuntado y de resistir las presiones que han declarado Ricardo Anaya, Alejandro Moreno y Luis Donaldo Colosio, la reforma no pasará.  Esto se enmarca en medio de las declaraciones del oficialismo del presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña y el coordinador parlamentario Adán Augusto, quienes han declarado que con 85 curules se puede aprobar. Morena intenta redefinir las matemáticas porque no tienen los votos; y producto de la soberbia se han cerrado al diálogo con la oposición.

Además, las declaraciones que coronaron la preocupación del oficialismo fueron las de López Obrador el 6 de septiembre, cuando desde la conferencia matutina declaró “llamo a que la oposición vote la reforma, el Poder Judicial está podrido”. Esta es la mejor muestra de que los votos no les alcanzan y el oficialismo está enojado porque no consiguen el voto faltante. Esto nos coloca en un escenario en el que el respaldo o el rechazo puede cambiar al régimen actual.

Esta semana será decisiva para el futuro de la república y la ciudadanía estará pendiente de la decisión de las y los legisladores opositores. Traicionar al electorado sería apostar por la autocratización del régimen; mientras tanto, el estudiantado, la sociedad civil y las y los trabajadores del Poder Judicial se mantendrán movilizados. Estamos a un voto del abismo.

Sebastián Godínez Rivera es licenciado en Ciencias Políticas y Sociales. Cursó un diplomado en Periodismo en la Escuela de Periodismo Carlos Septién. Fue profesor adjunto en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Actualmente, es columnista en Latinoamérica21, Politicx y conductor del programa de radio Café, política y algo más.

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