En México, la democratización del mundo del trabajo está lejos de alcanzarse: especialista
“Hemos detectado que hubo muchas consultas simuladas, que muchas de las viejas mafias sindicales, de los viejos aparatos, lograron simular la consulta y legitimar sus contratos y legitimar su sindicato; entonces, es bien importante, es un golpe al sindicalismo de protección que hayan desaparecido tantos contratos simulados, pero resulta que cuando volteamos a ver, el dinosaurio sigue ahí porque logró legitimar muchos contratos”, afirma el responsable del Centro de Libertad Sindical y Asesoría Laboral, Héctor de la Cueva Díaz
“La interrogante es ¿por qué se les palomeo?, porque de las pocas decenas de miles de contratos que sobrevivieron este proceso, muchos de ellos siguen sin representar realmente a los trabajadores”, revela el responsable del Centro de Libertad Sindical y Asesoría Laboral, Héctor de la Cueva Díaz
Por: Martín Velasco
Pese a la reforma laboral realizada en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, en México la democratización del mundo del trabajo está lejos de alcanzarse, advirtió este martes el responsable del Centro de Libertad Sindical y Asesoría Laboral, Héctor de la Cueva Díaz.
El especialista reconoció que durante todo el proceso de legitimación de contratos colectivos, desaparecieron casi medio millón de estos, lo que es inédito en el mundo.
Sin embargo, en México existen muchas interrogantes respecto a este proceso de legitimación, pues muchas mafias sindicales lograron el reconocimiento y por tanto, alcanzaron a sobrevivir para mantener el control y la explotación de los trabajadores en favor de los empresarios.
De la Cueva Díaz, comentó que otro problema derivado de la desaparición de estos contratos, es el vacío que existe en cuanto a contratación colectiva se refiere.
Puntualizó que el número de trabajadores con relaciones laborales individuales aumentó de manera considerable y por tanto están a merced de sus empleadores.
Consideró que hay un gran reto en el fortalecimiento de la contratación colectiva legítima en nuestro país y por tanto de tener auténticos sindicatos que defiendan los derechos de sus agremiados, sobre todo que existen muchas trabas para que se reconozca la representatividad de las organizaciones laborales.
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