“Que se investigue y, si hay corrupción, que se castigue”: AMLO
“Entre 2002-2018 la asociación civil -la que tiene que ver con estos investigadores- recibió alrededor de 100 millones de pesos para proyectos de ciencia y tecnología, y 471 millones de pesos para cubrir gastos de operación, entre los que se incluían choferes, celulares, servicios de bocadillos, salarios e impuestos de alrededor de 40 personas, comidas en restaurantes de lujo y viajes al extranjero”, comenta la directora del Conacyt en carta enviada al presidente López Obrador
Redacción Círculo Rojo
Con la promesa de que el próximo miércoles la directora del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez-Buylla, explique en la mañanera el asunto de los 31 investigadores acusados por la Fiscalía General de la República (FGR) de asociación delictuosa, el presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó que se investigue y, si hay corrupción, que se castigue.
Cuestionó ¿por qué nada más se va a castigar a los pobres, a los que no tienen con qué comprar su inocencia, a los que no tienen agarraderas, a los que no son influyentes? La impunidad, dijo, tiene que acabarse.
Ahora que hay esta polémica con los del Conacyt, tenían una asociación civil, un grupo de investigadores, y se iban a congresos y se les tenía que pagar del presupuesto hasta para sus lujos, y como tenían mucha influencia y buenas agarraderas, y buenas relaciones con los medios y con la intelectualidad orgánica del régimen, era una especie de chantaje y se les tenían que entregar estos fondos; y cuando ya desaparece eso, que ya no hay esas extravagancias, esos lujos, el derroche, pues entonces se inconforman y se quejan de que no se invierte en la ciencia, que no nos importa la innovación tecnológica.
¿Qué habían hecho?
Nada, nada, coloquios, congresos, viajes al extranjero, viáticos; ahora no, ahora es investigación aplicada, expresó como preámbulo a la lectura que recibió de parte la directora del Conacyt en la que describe los privilegios que este grupo de científicos predilectos tenía en el régimen anterior.
Entre 2002-2018 la asociación civil -la que tiene que ver con estos investigadores- recibió alrededor de 100 millones de pesos para proyectos de ciencia y tecnología, y 471 millones de pesos para cubrir gastos de operación, entre los que se incluían choferes, celulares, servicios de bocadillos, salarios e impuestos de alrededor de 40 personas, comidas en restaurantes de lujo y viajes al extranjero.
Asimismo, la asociación civil adquirió un inmueble de lujo en el centro de Coyoacán -¿por qué no en Iztapalapa?- con recursos que no justificó ante el Conacyt, además de que dicha asociación civil fue la instancia responsable de emitir el dictamen en 2007 que justificó las omisiones de las autoridades federales en relación con el rescate de los cuerpos y la ampliación de investigaciones relacionadas con la mina de Pasta de Conchos.
Ante las evidencias señaladas, López Obrador preguntó si ¿el combate a la corrupción va a ser selectivo o va a ser parejo?, ¿vamos a excluir a grupos, a potentados, a las élites ya sea de la academia, de la ciencia, de la intelectualidad, a las élites económicas o aplicamos el combate a la corrupción por parejo?
Luego, lamentó el vulgar reclamo de Aldo Aldrete, supuestamente uno de los investigadores perseguidos, quien en Twitter revela el nivel moral de su persona.
Comiencen con la puta pseudoescritora, pseudoinvestigadora. ¿No saben quién es? La zopilota, esa idiota que no sabe ni escribir una frase sin faltas de ortografía. Ella no tiene ningún fuero y gracias al pendejo loco, imbécil ese al que hoy limpian los zapatos ustedes y Gertz.
Esto, subrayó el presidente López Obrador, es para que entre todos analicemos el grado de descomposición al que nos llevaron con la política de pillaje, de corrupción, en donde lo más importante era triunfar a toda costa, sin escrúpulos morales de ninguna índole.
Ofende a Beatriz y me ofende a mí, pero de manera vulgar, o sea, ¿qué tenemos que ver nosotros?, pero es producto de todo un proceso de deformaciones que se fueron creando durante el periodo neoliberal.
Siempre he dicho que una cosa es la educación y otra cosa es la cultura y que los grados académicos no son sinónimo de cultura. Se pueden tener altos grados académicos y no tener sensibilidad en lo social, ni en lo humano y no poseer valores culturales, morales, espirituales, porque eso fue lo que hizo el neoliberalismo, también individualizó, dejó sin dimensión social, humana, la educación, la investigación, concluyó.
(Fotos lopezobrador.org.mx)