Yemen, al borde de una catástrofe por el hambre: ONU

Tres agencias de la ONU advierten de la grave agudización del hambre en el país árabe y de la falta de recursos para brindar asistencia humanitaria a la población. Unos 17.4 millones de yemenitas padecen inseguridad alimentaria y 1.6 millones sufrirán hambre en los próximos meses. Las personas en situación de hambruna se quintuplicarán para fin de año

UNICEF/Moohialdin Fuad: Un niño recibe tratamiento para la desnutrición en un hospital en Sana'a, Yemen

Redacción Círculo Rojo

Yemen está al borde de una catástrofe, con 17.4 millones de personas que necesitan ayuda para alimentarse y cada vez una proporción mayor de la población en condiciones de emergencia alertaron este lunes el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF).

En un comunicado conjunto, advirtieron que a menos que recibamos fondos sustanciales de inmediato, el hambre y la hambruna masivas avanzarán en Yemen.

Destacaron que el número de personas que probablemente no podrán satisfacer sus necesidades alimentarias mínimas en Yemen podría alcanzar la cifra récord de 19 millones de personas entre junio y diciembre de 2022.

Al mismo tiempo, se espera que otros 1.6 millones de personas en el país caigan en niveles de emergencia, lo que elevaría el total a 7.3 millones de personas para finales de año.

Precisaron que en todo Yemen, 2.2 millones de niños padecen desnutrición aguda, incluyendo más de medio millón de criaturas que están en riesgo de morir por la desnutrición aguda grave. Además, alrededor de 1.3 millones de madres embarazadas o lactantes sufren desnutrición aguda.

Hay que actuar ahora, dijo el coordinador humanitario de la ONU que pidió a las partes en el conflicto que levanten todas las restricciones al comercio y a la inversión de productos básicos no sancionados para ayudar a bajar los precios de los alimentos.

Carrera contra el tiempo

Las cifras desgarradoras confirman que estamos en una cuenta regresiva para la catástrofe en Yemen y casi no tenemos tiempo para evitarla, acotó el director ejecutivo del PMA, David Beasley.

La advertencia llega luego de que el fin de semana se reportaran combates intensos que dejaron decenas de muertos y heridos entre las fuerzas del gobierno y las tropas hutíes en las inmediaciones de Marib, una ciudad rica en petróleo del norte del país controlada por el gobierno.

Las hostilidades se produjeron al término de la primera semana de consultas del enviado especial de la ONU a Yemen, Hans Grundberg, con las partes en conflicto para buscar un futuro de paz en esa nación, cuyo conflicto dura desde 2015 y aumenta con el tiempo.

El recrudecimiento de la violencia causó la muerte o mutilación de al menos 47 niños durante enero y febrero pasados. El director general de la FAO, Qu Dongyu, señaló que tras siete años de hostilidades, muchas familias se ven privadas de los insumos necesarios para sus necesidades más básicas.

PMA/Hebatallah Munassar: Un niño come un suplemento alimenticio en un punto de distribución de asistencia del PMA en Mokha, Yemen

Fomentar la autosuficiencia agrícola

Dongyu, indicó que la agencia a su cargo trabaja directamente con los agricultores yemenitas para fomentar su autosuficiencia a través de una combinación de apoyo de emergencia inmediato a los medios de subsistencia y, a más largo plazo, asistencia para mejorar su resiliencia, respaldar la producción agroalimentaria local y compensar la dependencia de las importaciones.

La responsable de UNICEF, por su parte, resaltó el negativo impacto duradero del conflicto en los niños y agregó que cada vez son más los pequeños que duermen con hambre cada noche.

Esto los pone en mayor riesgo de deterioro físico y cognitivo e, incluso, de muerte. La situación de los niños en Yemen ya no puede pasarse por alto. Hay vidas en juego, enfatizó Catherine M. Russell.

La directora ejecutiva precisó que sólo para 2022, UNICEF necesita 484.4 millones de dólares para responder a la crisis humanitaria en ese país.

El más reciente análisis de inseguridad alimentaria da cuenta de un incremento de la desnutrición aguda entre los niños menores de cinco años, al igual que entre las madres primerizas.

Asimismo, cerca de 1.3 millones de mujeres embarazadas o lactantes están en riesgo por la grave falta de alimentos.

Yemen ya era uno de los países más pobres del mundo antes de que se intensificara el conflicto, pero hoy unos 2.2 millones de niños están ahora gravemente desnutridos, además de que 500 mil jóvenes enfrentan desnutrición aguda grave, una condición que puede provocarles la muerte.

Según PMA, FAO y UNICEF, las provincias más afectadas en este momento son Hajjah, Hodeida y Taizz.

El impacto de la guerra en Ucrania

El coordinador humanitario de la ONU para Yemen, recalcó que es primordial mantener la respuesta de emergencia integrada para millones de personas que requieren alimentos, agua potable, atención médica básica y protección.

David Gressly, explicó que el prolongado conflicto ha dado lugar al desastre económico en Yemen, aumentando así el hambre con la escasez y los altísimos precios de los alimentos.

Añadió que la guerra en Ucrania intensificará las necesidades dado su impacto en las importaciones. El 30% del trigo que se consumen en Yemen llega de Ucrania.

Se requiere paz para poner fin a la desgracia, pero se puede avanzar ahora. Las partes en conflicto deben levantar todas las restricciones al comercio y la inversión de productos básicos no sancionados. Eso ayudaría a bajar los precios de los alimentos y a reactivar la economía, dando a las personas la dignidad de un trabajo para dejar de depender de la ayuda, puntualizó Gressly.

(Noticias ONU)