Nadie puede ser obligado a permanecer en un cargo público, señala el Senado al aprobar renuncia del ministro Zaldívar a la SCJN
Al presentar el proyecto, la presidenta de la Comisión de Justicia, Olga Sánchez Cordero, advierte que la Constitución no establece un catálogo de causales graves para la procedencia de la renuncia de ministras y ministros de la Corte, por lo que quedan al arbitrio del ministro, del titular del Ejecutivo federal y del Senado. Precisa que en su renuncia Arturo Zaldívar expresa claramente la importancia de sumarse a la consolidación de la transformación de México y trabajar hacia un país más justo e igualitario
Con la aceptación de la renuncia del ministro Arturo Zaldívar se da paso a una nueva etapa en el Poder Judicial, por lo que “las consecuencias de dicho acto deben valorarse bajo el principio del libre desarrollo de la personalidad y no el de la politiquería”, señalan
Redacción Círculo Rojo
Con 63 votos a favor y 43 en contra, el Pleno del Senado de la República aprobó este miércoles la renuncia de Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
El dictamen refiriere que el pasado 7 de noviembre, el jurista y académico sometió su renuncia a consideración del presidente Andrés Manuel López Obrador; y el 8 de noviembre, el titular del Ejecutivo federal manifestó expresamente su aceptación de la dimisión.
Destaca que una correcta interpretación del texto constitucional no puede llevar al absurdo de obligar a un individuo a permanecer en un cargo público, aun en contra de su voluntad.
En ese sentido, subraya que, bajo una apreciación basada en la lógica, el derecho y el notorio precedente en el que se constituye el procedimiento llevado a cabo por el Senado de la República y que culminó con la aprobación de la renuncia del entonces ministro Eduardo Tomás Medina Mora Icaza, en 2019, también debe aprobarse la renuncia de Zaldívar Lelo de Larrea.
Al presentar el proyecto, la presidenta de la Comisión de Justicia, Olga Sánchez Cordero, indicó que la Constitución no establece un catálogo de causales graves para la procedencia de la renuncia de ministras y ministros de la Corte, por lo que quedan al arbitrio del ministro, del titular del Ejecutivo federal y del Senado.
Precisó que en su renuncia Arturo Zaldívar expresó claramente la importancia de sumarse a la consolidación de la transformación de México y trabajar hacia un país más justo e igualitario.
Durante la discusión del dictamen, el senador Navor Alberto Rojas Mancera, de Morena, felicitó a Arturo Zaldívar por actuar con congruencia al pedir su renuncia, toda vez que decidió participar en la transformación del país. En ese sentido, asentó que es momento de que los ministros que son abiertamente de derecha, como la ministra Norma Piña, también soliciten su renuncia.
Por el PAN, la senadora Kenia López Rabadán en un intento por descarrilar la aprobación de la renuncia de Zaldívar Lelo de Larrea, expresó que su bancada votaría en contra del dictamen y no porque quieran que el ahora ex ministro permanezca en la Suprema Corte, sino porque todo lo que rodea el procedimiento en torno a su dimisión está viciado. Además, indicó que el jurista siempre estuvo del lado del gobierno actual y ahora sólo se quitó la máscara.
En tanto, el senador Clemente Castañeda Hoeflich aseguró que el Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano no acompañaría el proyecto, ya que consideran que el Poder Judicial no puede estar sujeto a los vaivenes de la política ordinaria del país. Lo que la Corte debe hacer, sostuvo, es defender la Constitución, garantizar libertades y defender el Estado de Derecho.
En su oportunidad, la senadora del PRI, Nancy de la Sierra Arámburo, expresó que Arturo Zaldívar pasará a la historia por deshonrar a la máxima aspiración de todo jurista: servir a nuestro país, porque su renuncia fue para sumarse a un proyecto político que ha dejado clara su decisión de destruir al Poder Judicial.
Asimismo, el ex priista y ahora senador del Verde Ecologista, Jorge Carlos Ramírez Marín, expresó que el trabajo que les corresponde realizar a los senadores sobre la renuncia del ministro Zaldívar, no es el de la especulación, sino revisar lo que más le conviene a la República, por lo que hoy debemos dar un paso al frente y nombrar con categoría y altura de miras a quien deba sustituirlo, garantizando su autonomía frente a cualquier poder.
El senador del PT, Joel Padilla Peña, consideró que con la aceptación de la renuncia del ministro Zaldívar se da paso a una nueva etapa en el Poder Judicial, por lo que las consecuencias de dicho acto deben valorarse bajo el principio del libre desarrollo de la personalidad y no el de la politiquería.
En este tenor, la senadora del Partido Encuentro Social (PES), Elvia Marcela Mora Arellano, dijo que la Constitución no establece un catálogo de causa graves para admitir la renuncia de los ministros; debe entenderse que las causas graves que menciona el artículo 98, no son un impedimento en la toma de una decisión, sino que es para la protección de los derechos del propio ministro, acotó.
Al respecto, Juan Manuel Fócil Pérez, senador del PRD, denunció que el Senado no cuenta con los elementos suficientes para convalidar su petición; lo único grave es su renuncia a ser guardián de la Constitución, es grave su claudicación ante el oficialismo, ante el gobierno y más grave aún a los principios y valores que defendió en sus sentencias, asentó.
En cuanto al relevo de Arturo Zaldívar en la Suprema Corte, el senador del Grupo Plural, Gustavo Madero Muñoz, adelantó que, aunque la oposición vote en contra de la terna que propondrá el titular del Ejecutivo federal, como señala la legislación, se darán las condiciones para imponer a quien ocupará el cargo de ministro del máximo tribunal.
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