Sucesión en la Facultad de Ciencias Políticas
La importancia de las facultades de Ciencias Sociales en el mundo radica en la posibilidad de promover discursos o temas de investigación que interesan a los gobiernos. Desde las dictaduras militares latinoamericanas que promovieron la formación de diplomáticos, pasando por las propuestas para fortalecer las transiciones a la democracia hasta abordar los cambios sociales y políticos que impactan el mundo
Por: Sebastián Godínez Rivera
La competencia por suceder a la directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, Carola García, inició en octubre. La disputa entre las y los docentes para conformar una terna que será enviada a la Junta de Gobierno de la Universidad está llena de nombres de al menos cinco carreras distintas: Sociología, Ciencia Política, Administración Pública, Ciencias de la Comunicación y Relaciones Internacionales.
La facultad es una de las más pobladas de la universidad, aunado a que es una de peso en cuanto al análisis de los problemas que ocurren en México. Sobre todo, porque la UNAM es considerada como un laboratorio de la realidad social; no obstante, la FCPyS es uno de los espacios que más se asemeja a la realidad nacional. La politización, la diversidad de ideas y los temas nacionales e internacionales son la materia de estudio que divide la opinión pública y la facultad.
Históricamente Ciencias Políticas se ha caracterizado por los tintes de izquierda, pero no son los únicos. Al contrario, todas las posturas convergen, desde la derecha hasta el progresismo; empero, no debemos olvidar que en los últimos tiempos ha Sido atacada al igual que el resto de la universidad.
El sexenio anterior, la UNAM y la propia facultad fue descalificada al ser señalada de “neoliberal”, “no estar a la altura de los retos naciones”, “derechizarse” e “ignorar al pueblo”. Asimismo, los embates del oficialismo contra la facultad versaron con los mismos descalificativos. Lamentablemente, algunos sectores creen que las Ciencias Sociales implican adoptar una postura a favor o en contra del gobierno en turno.
La facultad comenzará a calentarse debido a la intromisión de los diversos grupos y actores políticos que hay en la universidad. Como es costumbre algunos sectores consideran a la universidad y sus facultades como un botín político para imponer su ideología y cuotas de poder, como han propuesto los estudiosos de las élites Mosca, Michels o Paretto.
Lo anterior se ha comprobado empíricamente, porque en la sucesión por la rectoría y otras facultades como Derecho o Medicina estos grupos se hacen presentes. Sobre todo, en un contexto marcado por la reforma judicial que movilizó al estudiantado de la primera, aunado al paro de labores que hubo hace unas semanas en la segunda. Por eso no debe descartarse que con Ciencias Políticas será distinto.
Sobre todo, porque de la facultad han surgido varias voces que a lo largo de la historia han sido críticas con los gobiernos que han encabezado el país. La importancia de esta facultad es que funge como una suerte de motor que impulsa agendas de gobierno, temas coyunturales e investigaciones. Esto está marcado por el contexto donde la diversidad y la libertad de cátedra han sido descalificadas y atacadas desde el poder.
Lo cierto es que como científicos sociales nos regimos por la objetividad, cientificidad y la imparcialidad. Quienes consideran que usamos la ciencia como herramienta para la politiquería desconocen nuestro campo de estudio. Nuestro objetivo es problematizar y abonar a la construcción de las soluciones que requiere el país, aunado al estudio de los diversos fenómenos sociales.
La importancia de las facultades de Ciencias Sociales en el mundo radica en la posibilidad de promover discursos o temas de investigación que interesan a los gobiernos. Desde las dictaduras militares latinoamericanas que promovieron la formación de diplomáticos, pasando por las propuestas para fortalecer las transiciones a la democracia hasta abordar los cambios sociales y políticos que impactan el mundo.
Mientras tanto, en la facultad se espera que quienes integren la terna final sean personas que vean por las Ciencias Sociales, que resuelvan los problemas de la facultad, que tengan una visión de futuro acerca de los fenómenos que ocurren en México y el mundo. La persona titular de la dirección se dará a conocer a mediados de noviembre de este año, así que a esperar.
Sebastián Godínez Rivera es licenciado en Ciencias Políticas y Sociales. Cursó un diplomado en Periodismo en la Escuela de Periodismo Carlos Septién. Fue profesor adjunto en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Actualmente, es columnista en Latinoamérica21, Politicx y conductor del programa de radio Café, política y algo más.
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