Posibles nexos entre autoridades y asesino de sacerdotes, línea de investigación que inquieta a AMLO

“Hay que investigar porque es inaceptable y además muy sospechoso el que una persona así llevara una vida tan normal, porque de acuerdo al informe de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, era patrocinador de un equipo de béisbol, con los antecedentes que ya tenía, y conocido en toda la región con órdenes de aprehensión”, destaca el presidente López Obrador

El presidente López Obrador comparte con papa Francisco concepto sobre la paz, y advierte que la estrategia de seguridad no cambiará

Redacción Círculo Rojo

Al asegurar que los asesinatos de los sacerdotes jesuitas Javier Campos Morales, de 79 años, conocido como El Padre Gallo, y Joaquín César Mora Salazar, de 80, así como el del guía de turistas Pedro Eliodoro Palma Gutiérrez, el lunes al interior de la iglesia de la comunidad de Cerocahui, del municipio Urique, Chihuahua, se investigarán a fondo y que la búsqueda de los responsables continúa, el presidente Andrés Manuel López Obrador admitió que el papa Francisco tiene razón al advertir que la violencia no resuelve los problemas, sino que aumenta el sufrimiento innecesario.

Él escribe un mensaje lamentando la situación de violencia en México, pero al mismo tiempo subrayando de que no es la violencia el camino para conseguir la paz, que la violencia genera más violencia. (…) Estamos totalmente de acuerdo, expresó.

En su conferencia de prensa matutina de este jueves, Andrés Manuel dijo que se considerará como línea de investigación un posible arreglo entre autoridades y el presunto responsable del crimen, identificado por la Fiscalía General del Estado de Chihuahua como José Noriel Portillo Gil alias El Chueco, a fin de conocer toda la verdad.

Hay que investigar porque es inaceptable y además muy sospechoso el que una persona así llevara una vida tan normal, porque de acuerdo al informe de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, era patrocinador de un equipo de béisbol, con los antecedentes que ya tenía, y conocido en toda la región con órdenes de aprehensión, explicó.

Destacó que la colaboración de los pobladores es muy importante, pues en toda la Sierra de Chihuahua, El Chueco es conocido.

Hay que ver si no había impunidad, protección, arreglos, acuerdos, con quiénes. Entonces, sí vamos ir a fondo, que se conozca toda la verdad. Y es seguro que los propios sacerdotes, los propios jesuitas que vivían ahí, las madres, saben todo y con mucho cuidado pueden ayudar; además, son misioneros, es gente que dedica su vida a ayudar a los más desposeídos, a los abandonados, a los débiles. Entonces, va a ayudar mucho el que sepamos todo, subrayó.

En el Salón Tesorería de Palacio Nacional, el presidente López Obrador sostuvo que en materia de seguridad se avanza y que el triple homicidio en la Tarahumara, no lo obligan a replantear la estrategia, que todo esto es el fruto podrido de una política de corrupción, de impunidad, que se implementó desde los tiempos de Felipe Calderón.

Pero pero hay más violencia, más asesinatos que en los anteriores, se le planteó: Sí, porque no se puede arrancar de raíz de la noche a la mañana, de un día para otro un problema que lleva años y que además se propició, se alentó.

Dicen: ‘Es que ahora hay más asesinatos que en la época de Felipe Calderón’. Sí, nada más que nosotros recibimos los homicidios hasta la punta, hasta mero arriba y Calderón no recibió así el país, él lo llevo arriba, y todavía en el gobierno pasado le subieron más. El daño, afirmó, fue muy grave, los errores en política son como crímenes, sentenció.

Responder a la violencia con más violencia, fue sí la lucha frontal de Calderón, pero no fue pareja; los que tenía acuerdos con el gobierno o García Luna, pues podían actuar con impunidad; los que no tenían acuerdo, pues esos sí eran perseguidos y frontalmente atacados, al grado de que se les eliminaba, era ‘mátalos en caliente’.

Reconoció que en su gobierno no ha habido la disminución de homicidios que quisiéramos, pero hay una contención y hemos logrado, aunque sea poco, bajar, acotó al reiterar que atender las causas de la violencia es la prioridad en materia de seguridad y que su estrategia avanza.

Nunca atendieron a los jóvenes, porque desprecian a los pobres, desprecian al pueblo, ese es el fondo del asunto, son clasistas, son racistas. No vivíamos en una democracia, era una oligarquía… La democracia era de fachada. Ahora estamos atendiendo las causas y claro que lleva tiempo, porque con la profunda crisis y sobre todo con la pérdida de valores se desintegraron familias, se afectó el tejido social, se quería hacer valer que lo importante era lo material, el dinero.

Y ahora hay que insistir que sólo siendo buenos podemos ser felices y por eso ‘¡qué barbaridad!’, les extraña, les sorprende y lo ven como una desproporción, un dislate: ¡cómo de que abrazos, no balazos!, y ahí coincide plenamente este conservadurismo de nuestro país, este pensamiento conservador, con el pensamiento conservador del gobernador de Texas, pero no con el Papa, ni con otros. No permitir la corrupción y la impunidad, dijo, ayuda mucho.

(Fotos lopezobrador.org.mx)