Horario de verano tiene efectos adversos en el sistema nervioso y psicoemocional: SSa
“En lo psicoemocional, el cambio de horario incrementa la depresión y las ideas suicidas en algunas épocas del año; representa mayor riesgo para quienes requieren de concentración al iniciar el día. Aunado a esto, debido a la fatiga disminuye el rendimiento escolar y laboral, así como la productividad en general, lo que ha provocado un mayor uso de estimulantes”, destaca el doctor Alcocer Varela
Redacción Círculo Rojo
El horario de verano tiene efectos adversos en el sistema nervioso, lo que ocasiona somnolencia, irritabilidad, problemas de concentración y de memoria, así como trastornos digestivos, con disminución del apetito durante el día y aumento en la noche, destacó el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela.
Momentos antes de que el presidente Andrés Manuel López Obrador firmara la iniciativa de Ley de Husos Horarios en los Estados Unidos Mexicanos que este día enviará al Congreso de la Unión para que se discuta y, en su caso, se apruebe la eliminación del horario de verano, el doctor Alcocer Varela comentó que la imposición de éste en 1996 fue una decisión política, motivo por el cual se puede cambiar, principalmente porque las diferencias entre el reloj social y el biológico alteran y desafían la salud de las personas.
Por ejemplo, las Sociedades Internacionales del Sueño aconsejan un horario sin cambios y recomiendan mantener el horario de invierno, mientras que la Sociedad Internacional para la Investigación de los Ritmos Biológicos concluyó que las ventajas del horario estándar superan a las del cambio de horario, comentó.
El doctor Alcocer Varela, destacó que en lo psicoemocional, el cambio de horario incrementa la depresión y las ideas suicidas en algunas épocas del año; representa mayor riesgo para quienes requieren de concentración al iniciar el día, como pilotos, escolares y docentes, entre otros. Aunado a esto, debido a la fatiga disminuye el rendimiento escolar y laboral, así como la productividad en general, lo que ha provocado un mayor uso de estimulantes.
El secretario de Salud destacó que el horario de invierno, es decir, el horario real, promueve un ritmo biológico más estable que el de verano, mejora el rendimiento intelectual y ayuda a disminuir enfermedades del corazón, obesidad, insomnio y depresión.
Con la modificación al reloj, dijo, la duración del sueño en las y los adolescentes disminuye un promedio de 32 minutos por noche, principalmente en las primeras dos semanas después de iniciado el horario de verano, y las personas adultas necesitan de tres a siete días para adaptarse al cambio de hora y la niñez requiere más tiempo, además de que la falta de sincronización con el ambiente altera el orden temporal interno y causa problemas físicos y mentales.
Desaprueba 71% el horario de Verano
En el Salón de la Tesorería de Palacio Nacional, la secretaria de Energía (Sener), Roció Nahle García, expuso que de acuerdo con los resultados de la encuesta realizada en junio por la Secretaría de Gobernación (Segob), el 71% de la población no está a favor del horario de verano y solo el 29% lo aprueba.
Hay una inconformidad permanente en la sociedad desde 1996 cuando se instaló este horario; hay más de 40 iniciativas de ley presentadas desde 2001 en contra del horario de verano por diferentes fracciones parlamentarias. La evidencia científica demuestra que no se presentan cambios importantes en la luz solar en los países cercanos a los Trópicos, por lo que no está justificada su implementación desde 1996, acotó.
El ahorro de energía, dijo Nahle García, es muy bajo, menor al uno por ciento anual del consumo nacional, debido a la constante innovación tecnológica en enseres domésticos, así como el cambio de luminarias convencionales por ahorradoras de energía, de modo que no impacta favorablemente en el gasto familiar, apuntó.
En el 2021 el consumo nacional y el ahorro por el horario de verano solamente fue de 537 gigawatts por hora, que equivalen a un 0.16% del consumo nacional y un ahorro económico de mil 138 millones de pesos, que representa sólo el 0.2% del consumo nacional de electricidad, sostuvo.
Roció Nahle, precisó que de acuerdo con datos de la Secretaría de Energía, del Instituto Nacional de Electricidad y Energías Limpias, del Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica y de la Comisión Federal de Electricidad, la reducción de emisiones de dióxido de carbono durante 2019 fue de apenas 0.07% del total nacional.
(Fotos lopezobrador.org.mx)