Panistas en San Lázaro acusan nuevo saqueo al Fondo de Salud
La diputada Sonia Rocha Acosta dice que los recursos acumulados en el Fondo de Salud para el Bienestar son 66 mil millones de pesos, y “se han convertido en el botín que el Gobierno federal quiere usar para gastar a su antojo, sin importar que sean las reservas acumuladas para enfrentar las enfermedades que empobrecen a las familias mexicanas. En todo el país hay 66.7 millones de personas sin seguridad social que deberían estar atendidas por el Insabi y con recursos del Fondo de Salud para el Bienestar. ¿Qué va a pasar con esta población cuando se terminen los recursos que Morena derrocha?”, cuestiona
Redacción Círculo Rojo
Diputadas y diputados del PAN afirmaron que mediante un artículo transitorio en la Ley de Ingresos para 2022, el Gobierno federal y Morena nuevamente quieren saquear el Fondo de Salud que garantiza la atención de enfermedades graves y costosas para la población sin seguridad social.
En conferencia de prensa, indicaron que en la Ley de Ingresos se está estableciendo que el Instituto de salud para el Bienestar (Insabi) va a transferir a la Tesorería el remanente del patrimonio para financiar gastos catastróficos.
La diputada Sonia Rocha Acosta dijo que los recursos acumulados en el Fondo de Salud para el Bienestar son 66 mil millones de pesos, y se han convertido en el botín que el Gobierno federal quiere usar para gastar a su antojo, sin importar que sean las reservas acumuladas para enfrentar las enfermedades que empobrecen a las familias mexicanas.
En todo el país hay 66.7 millones de personas sin seguridad social que deberían estar atendidas por el Insabi y con recursos del Fondo de Salud para el Bienestar. ¿Qué va a pasar con esta población cuando se terminen los recursos que Morena derrocha?, cuestionó.
Refirió que tal y como lo ha mencionado el colectivo Cero Desabasto, no es viable pretender atender a más personas y a la par quitar parte de los recursos al fondo para financiar las enfermedades de alto costo.
Por su parte, el diputado Éctor Ramírez Barba indicó que las organizaciones civiles de pacientes están alertando que esta disminución financiera se podría traducir en el corto y mediano plazos en menos tratamientos y atenciones brindadas oportunamente a pacientes.
Señaló que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) debe explicar cuánto dinero le van a quitar a este fondo que garantiza medicamentos y tratamientos a quienes no cuentan con afiliación a una institución de seguridad social o si de plano piensan usar la totalidad de la reserva y liquidarlo, como ya hicieron con cientos de fideicomisos, como el Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales (Fonden), el año pasado.
Explicó que en el Paquete Económico de 2022 el Gobierno federal presume un incremento de gasto para la Secretaría de Salud (Ssa) en 27.6 por ciento en términos reales.
Sin embargo, sería un grave retroceso si para alcanzar esta cifra se compromete el patrimonio del país a futuro y nos quedamos sin recursos para atender a la población sin seguridad social en los próximos años, como todo indica va a suceder, por la irresponsabilidad y ambición de Morena en el manejo de los fideicomisos.
Con el Seguro Popular, dijo, el propósito de este fondo era garantizar el financiamiento de enfermedades como los cánceres infantiles y el de mama, pero con la reforma de Morena al sistema de salud de 2019 este fondo se ha convertido en la ‘caja chica’ del Gobierno Federal para obtener recursos adicionales de manera fácil.
Agregó que en 2019 le quitaron 40 mil millones pesos al Fondo cuando se creó el Insabi; en 2021 le quitaron otros 33 mil millones de pesos en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2022 para el ejercicio fiscal en curso, por lo que el Ejecutivo federal ha tenido transferencias extraordinarias de hasta 73 mil millones de pesos, cuyo origen es el patrimonio del Fondo de Salud para el Bienestar.
Sin embargo, no hay resultados; con el proceso de desaparición del Seguro Popular muchos enfermos tienen que pagar para atenderse y muchos otros fallecieron sin haber recibido el tratamiento por la falta de financiamiento.
Ramírez Barba apuntó que quedó sepultada la promesa del presidente de cobertura universal; Insabi no cubre ni aquello que sí garantizaba el Seguro Popular. Con el Seguro Popular había garantía de atención a 66 enfermedades, las más graves y frecuentes en la población. Hoy, con la 4T la atención, incluso para población vulnerable como los niños con cáncer, disminuyó dramáticamente.
El Presidente se había comprometido a cubrir al menos 33 enfermedades más con recursos de este fondo, pero sólo ha entregado dolor y muerte a los pacientes; no hay una sola intervención médica adicional en este gobierno, enfatizó.
En reiteradas ocasiones el Ejecutivo federal ha intentado eliminar este fondo para utilizarlo con fines discrecionales, pero la oposición lo ha detenido.
Por ello, indicó, las y los diputados del PAN también presentaron una iniciativa para blindar los recursos del Fideicomiso del Fondo de Salud para el Bienestar para que no se utilicen para otros fines que no sean la atención a enfermedades, además de exigir una mayor transparencia de su uso.
Comentó que propusieron que el Insabi presente semestralmente al Congreso de la Unión un informe sobre los recursos acumulados del patrimonio del fideicomiso.
Asimismo, para asegurar su sostenibilidad financiera, el Gobierno federal aportará anualmente al fondo, al menos, una cuota social por cada persona sin seguridad social para garantizar su atención; ello garantizaría recursos disponibles por cada persona beneficiaria del Insabi.
Abundó que el Fondo de Salud estaría obligado a mantener los recursos necesarios para garantizar el financiamiento de la atención de enfermedades que provocan gastos catastróficos para un periodo de cinco años, por lo que no podrá ser la caja chica del Gobierno federal.
Además, dijo, se propone que se amplié en 33 nuevos padecimientos el catálogo de enfermedades cubiertas.
No permitamos el desvío de los recursos que integran el Fondo contra Gastos Catastróficos, hoy Fonsabi, pues ello pondría en peligro la salud y la vida de nuestras familias.
(Fotos Diputados)