OEA condena “enérgicamente” el asalto a la Embajada de México por policías de Ecuador

Con 29 votos a favor, el voto en contra de Ecuador y una abstención, el Consejo Permanente de la OEA reafirma ‘la obligación de todos los Estados de velar por el respeto de los privilegios e inmunidades de las misiones diplomáticas y del principio de inviolabilidad’, como establece el Derecho Internacional para las relaciones pacíficas entre las naciones, como requisito crucial, por lo que llama a ambos países a buscar una solución a la crisis diplomática, y a los gobiernos miembros a respetar la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y asegurar que los mencionados principios sean respetados sin excepción

El paso viernes 5 de abril, la policía ecuatoriana entrar por la fuerza en la Embajada de México en Quito para detener al ex vicepresidente Jorge Glas Espines, quien había recibido asilo político en la sede diplomática mexicana

Redacción Círculo Rojo

La mayoría de los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA), aprobaron este miércoles condenar enérgicamente la irrupción de la policía ecuatoriana en la Embajada de México en Quito para detener al ex vicepresidente de esa nación sudamericana, Jorge Glas Espines, quien había recibido asilo político en la sede diplomática mexicana, y acusó al gobierno del presidente Daniel Noboa Azin de haber violado la Convención de Viena y la política de asilo.

Con 29 votos a favor, el voto en contra de Ecuador y una abstención, el Consejo Permanente de la OEA reafirmó la obligación de todos los Estados de velar por el respeto de los privilegios e inmunidades de las misiones diplomáticas y del principio de inviolabilidad, como establece el Derecho Internacional para las relaciones pacíficas entre las naciones, como requisito crucial, por lo que llamó a ambos países a buscar una solución a la crisis diplomática, y a los gobiernos miembros a respetar la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y asegurar que los mencionados principios sean respetados sin excepción.

Al subrayar que el respeto a la Convención de Asilo Diplomático de 1964 es una obligación, la OEA en su resolución consideró, también, que sin perjuicio de las inmunidades, las personas que gocen de los privilegios deben respetar las leyes y reglamentos del Estado receptor sin inmiscuirse en asuntos internos de esa nación.

Recordó, además, que los locales de las misiones diplomáticas tampoco deberán ser usados de manera incompatible con las funciones de la misma.

Finalmente, el foro internacional llamó a Ecuador y México a dialogar para encontrar una solución a este grave asunto, para lo cual interpuso sus buenos oficios.

A pesar de que una mayoría contundente de miembros de la OEA condenaron la acción del gobierno de Daniel Noboa, su canciller, Gabriela Sommerfeld, afirmó que la resolución fue justa porque se ve el incumplimiento y el uso de la sede, y advirtió que Ecuador hará respetar su versión de los hechos.

Al ser consultada por la prensa si el gobierno ecuatoriano estaría dispuesto a ofrecer una disculpa por sus actos, Sommerfeld respondió que eso no está en la mesa de discusión en este momento, pero se mostró abierta a fortalecer relaciones con todos los países.

Mientras tanto, en su conferencia de prensa matutina el presidente Andrés Manuel López Obrador, anunció que el Gobierno de México decidió posponer para el jueves la presentación de la denuncia contra Ecuador en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en la Haya, Holanda.

Un día antes, la canciller mexicana, Alicia Bárcena Ibarra, solicitó a los países que conforman la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), sumarse a la demanda contra Ecuador y a la carta que enviarán al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, para denunciar el incidente ante la Asamblea General del organismo.

La irrupción de las fuerzas policiales ecuatorianas en la Embajada de México en Quito, ha sido condenada por una treintena de países de la región y de Europa y ocho organismos internacionales, entre ellos la Organización de los Estados Americanos (OEA) que la víspera sostuvo una reunión extraordinaria para evaluar la crisis diplomática.

México, en tanto, dio a conocer ayer martes inéditos videos que mostraban el momento en que agentes de la policía ecuatorianas irrumpieron la noche del pasado viernes en su sede diplomática y tras empujar y someter al jefe de la sección consular mexicana, Roberto Canseco, se llevaron detenido al ex vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, quien residía en la Embajada desde diciembre, luego de ser acusado de corrupción.

López Obrador, dijo este miércoles que envió los videos al presidente Joe Biden, y que tras recibirlos hubo una rectificación de parte de Estados Unidos y se dio un pronunciamiento más enérgico contra Ecuador.

El mandatario federal, agradeció el gesto de Biden e indicó que esperaba que Canadá también rectifique su postura inicial sobre el incidente diplomático, aunque sostuvo que México era respetuoso de las decisiones que tomen los gobiernos.

Luego de la entrada violenta de las fuerzas de seguridad ecuatorianas en la sede diplomática mexicana en Quito, el presidente López Obrador decidió romper relaciones con Ecuador, y ordenó el cierre indefinido de su embajada en la nación sudamericana y la retirada de todo el personal diplomático que arribó el pasado domingo a la Ciudad de México.

Hecho el anuncio, la cancillería ecuatoriana afirmó, en un comunicado, que la ruptura de las relaciones diplomáticas con México no implica un cierre de los servicios consulares de Ecuador en ese país, y que seguirán activos tanto en Ciudad de México como en Monterrey; mientras que los acuerdos suscritos entre ambos países continúan en plena vigencia y aplicación.

Tras la invasión a la sede diplomática, México trasladó los servicios consulares que tenía en Ecuador a sus embajadas de Colombia, Perú y Chile.

En la sesión extraordinaria de la OEA, Ecuador ofreció una explicación sobre los hechos a través de su viceministro de Movilidad Humana, Alejandro Dávalos, quien pidió a la comunidad internacional revisar y actualizar las normas sobre asilo diplomático y otros instrumentos internacionales para erradicar los nuevos fenómenos delictivos de crimen organizado trasnacional.

Dávalos, aseguró que Glas no reunía los requisitos para recibir el asilo y negó que al ex vicepresidente se le pueda considerar un perseguido político.

Asimismo, cuestionó la defensa que hizo México al asilo que otorgó a Jorge Glas, y dijo que con su actitud socava y desnaturaliza la figura del asilo y se promueve la impunidad.

(Fuente Agencias)